La Pirámide Turquesa

Asociada a la pureza y la inocencia , la Pirámide de Turquesa nos invita a la introspección, a mirar hacia dentro y vernos tal como éramos antes de formarnos, educarnos y disciplinarnos.

La Pirámide Turquesa nos invita a mirar el mundo con los ojos asombrados de un niño, descubriendo con asombro y entusiasmo universos totalmente desconocidos mediante la exploración sin puntos de referencia.

Nos invita a vivir en el momento presente, sin pasado ni futuro, centrados en la exploración inmediata, sensible y emocional de cualquier situación, movimiento o aprendizaje.
Aliada de los músicos, los poetas y todos los artistas, nos lleva a redescubrir la alegría inocente e ingenua del niño maravillado.

Aplicada regularmente sobre el timo , la pirámide de turquesa ayuda a descristalizar los tejidos escleróticos de esta glándula, lo que es esencial para el proceso de memorización, aligerando gradual y regularmente la carga y abriendo la puerta al desaprendizaje, permitiendo la libertad de descubrimiento, exploración y expresión.

Simplifica los procesos imaginarios y conduce a una mayor fe en lo irracional, lo inaceptable, abriendo así las vías de despliegue del individuo en el colectivo al que pertenece. Siendo este colectivo una definición formateada por la memorización de leyes aprendidas, consideradas como adquiridas por una mayoría determinante.

Asociada a la pureza y la inocencia, la Pirámide de Turquesa nos invita a la introspección, a mirar hacia dentro y vernos tal como éramos antes de formarnos, educarnos y disciplinarnos.

La Pirámide Turquesa trabaja en las profundidades de la materia:

Mantiene la cohesión necesaria entre los átomos, une entidades independientes y construye puentes armoniosos.

Es un intercesor cósmico, un ecualizador, un equilibrador.

Ella es la que une, conecta, trae la verdad, la belleza y la dulzura.

Proporciona los lazos que unen todos los elementos de un conjunto en una relación armoniosa.

Crea el todo, donde coexisten entidades aparentemente separadas.

Calma, coordina, regenera e iguala todos estos elementos de conexión.

En la esfera emocional :

 

Amplifica cualquier demanda de vínculos, conexiones, contacto, comunicación e intercambio, porque conecta.

Facilita la expresión de un mundo interior armonioso, pacífico y coherente, y fomenta el intercambio que une a las personas.

En la esfera mental :

 

Amplifica la cohesión de los pensamientos, su conexión.

Facilita la extracción de egregores pesados (pensamientos obsesivos) al armonizar en frecuencias altas, aportando una cohesión que borra las notas falsas y los acordes disonantes.

Facilita un pensamiento claro, puro y radiante.

Fomenta el debate constructivo.

Permite elaborar resúmenes sencillos, claros y coherentes.

La Pirámide Turquesa y el timo

El timo es un vórtice multidimensional que, una vez reactivado, permite acceder a todas las dimensiones y a todos los universos.

Un camino hacia la realidad del ser.

Sus múltiples grupos de memoria ofrecen rutas de navegación para los aventureros y exploradores de todas las posibilidades.

La Pirámide Turquesa permite explorar conscientemente estas múltiples posibilidades.